Doctrina parte 3
Por lo tanto, casi todos los humanos de hoy tienen una "copia" del Alma de Adán. Si el Alma de Adán "cae", entonces nuestras almas también "caen". Todo lo que "sucede" en el Alma de Adán, también "sucede" a nuestras almas: ya que nuestras almas son meras "copias" de su Alma divina. Cuando Adán "pecó" en el Jardín del Edén, su Alma "cayó" (murió en el Mundo de los Espíritus), y nuestras almas también murieron en el Mundo de los Espíritus. Adán, el Hijo de Dios, se convirtió en el Hijo Pródigo. Adán tuvo que regresar a esta Tierra, como Jesús de Nazaret, para "expiar" su "pecado" en el Jardín de Maru-Atón. Antes de la "Caída" de Adán, no había muerte en el Mundo de los Espíritus. Todas las almas estaban vivas (conscientes) en ese reino. En la Caída de Adán (Sí) la "muerte" (inconsciencia) entró en el mundo del Espíritu. Es por eso que el Antiguo Testament...